miércoles, 20 de abril de 2022

Cepillos de limpieza

Quiero compartir un descubrimiento de esta última etapa con la traqueo, la que empezó justo antes del confinamiento.

Cuando usaba cánula de plata, la limpiaba con un cepillo grande, rígido y curvado que me daban en la residencia, y duraba bastante. Ahora, con la cánula de silicona, ese cepillo no entra y usaban uno más pequeño y delicado para no estropearla, que además no era tan fácil que me dieran alguno extra. El caso es que cuando se rompía buscaba y buscaba en ortopedia, farmacia y similares y no encontraba nada decente. Una vez cogí uno parecido en la ortopedia por 6 euros que duró un suspiro. Como para cambiarlo cada semana, vamos.

Como no quedaba tranquila investigué por internet y encontré unos que tenían buena pinta. Eran de forma similar, en un paquete con 4 unidades, y el precio no era exagerado. Fui a mi farmacia de confianza y la suerte quiso que el representante de una compañía estuviera allí y los pudiera conseguir. Son de la marca Dr Brown's. Son muy cómodos, y siempre llevo uno conmigo para limpiar en caso de emergencia. En vez de quitar todo, o meter un trocito de klínex, es más práctico introducir parte de las cerdas en la cánula, girar un poco para que agarre más moco, y listo.


   Paquete cepillos Dr Brown's
Cepillo cánula plata
        Cepillo cánula silicona
Cepillo Dr Brown's





jueves, 7 de abril de 2022

Película de espías

Cuando ya me pude levantar de cama tras la operación, y a pesar de no mantenerme bien de pie, todavía estaba muy débil tras 5 días sin comer ni beber y postrada excepto para ir al baño, intentaba caminar algo por el pasillo.

En un paseo tras la merienda, a lo lejos, en el control de enfermería, vimos unos polis con chaleco y pistola, que agarraban por los brazos a uno que supusimos era un preso, esposado y con las manos tapadas. 

Como iba tan lenta caminando, al dar otra vuelta, aparece el de mantenimiento de Ferrovial a sellar las ventanas de la habitación que le asignaron. La habitación de al lado mía, qué casualidad!

Al dar otra vuelta, delante de la sala de estar de la planta para pacientes y familiares, al final del pasillo, se oye un walkie talkie. Era la secreta!!!

Los polis pasaron todo el tiempo en unos sillones delante de la puerta de la habitación (siempre abierta, hay que decir), uno a cada lado, controlando al individuo.

Un despliegue de película, que a los pacientes nos dio algo de vidilla y un cotilleo con qué entretenernos.